Anteriormente la clasificación de invernaderos consideraba baja, media y alta tecnología, pero ahora se habla más de estructuras pasivas, semiactivas y activas. De esta manera nos enfocamos en utilizar la tecnología adecuada en dependencia de las necesidades existentes de la ubicación del invernadero.
¿Quién propuso la división por niveles tecnológicos de los invernaderos?
La propuesta de la división de los invernaderos por niveles tecnológicos se atribuye principalmente a la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura). Esta clasificación se desarrolló como parte de los esfuerzos de la organización por establecer un marco claro para entender y categorizar los diferentes tipos de invernaderos existentes, de acuerdo con su complejidad tecnológica, inversión y capacidad de controlar el ambiente de cultivo.
El objetivo de esta división es facilitar el análisis comparativo de los sistemas de producción bajo condiciones protegidas y poder orientar a productores y técnicos sobre cuál tipo de invernadero se adapta mejor a sus necesidades, recursos y contexto geográfico. De esta forma, la FAO propuso una categorización que va desde niveles más básicos hasta invernaderos altamente tecnificados.
En esta clasificación, se suelen considerar tres niveles tecnológicos:
Invernaderos de baja tecnología
Son estructuras sencillas, con costos de inversión relativamente bajos y un control ambiental mínimo. Usan materiales como plásticos o mallas para cubrir y proteger los cultivos, pero no tienen sistemas automatizados. La ventilación suele ser natural, y el riego y fertilización se realizan de manera manual o con técnicas básicas. Este tipo de invernaderos es común en zonas de recursos limitados o donde no se necesita un control ambiental muy preciso.
Invernaderos de media tecnología
Tienen un diseño estructural más robusto y un mayor grado de control ambiental. Aquí se pueden encontrar sistemas de riego por goteo, ventilación forzada y controles más avanzados para temperatura y humedad. Estos invernaderos buscan optimizar las condiciones de crecimiento, mejorar la eficiencia en el uso de recursos y aumentar la producción y calidad de los cultivos.
Invernaderos de alta tecnología
Son estructuras modernas y avanzadas, diseñadas para un control total del ambiente de cultivo. Suelen contar con sistemas automatizados de climatización, riego, fertirrigación, iluminación y monitoreo constante de parámetros como pH, humedad y temperatura. Estos invernaderos requieren una inversión alta y un manejo técnico especializado, pero permiten maximizar la producción y alcanzar estándares de calidad superiores. Son utilizados en zonas donde la rentabilidad y la alta productividad son esenciales, como en la producción de cultivos de exportación.
Esta división por niveles tecnológicos ha permitido que la industria de la agricultura protegida tenga una guía clara para desarrollar sistemas de invernadero de acuerdo con las necesidades y posibilidades de cada productor, así como con el objetivo de mejorar la eficiencia, sostenibilidad y rentabilidad de los cultivos bajo condiciones protegidas.