La zarzamora es una de las 4 berries comerciales que en la actualidad tienen mayor relevancia, junto con la fresa, la frambuesa y el arándano; en el caso de la zarzamora se trata de un cultivo perenne que mantiene su sistema radicular a lo largo de los años, mientras que la parte aérea de la planta es anual.
Al tratarse de un cultivo cuyas raíces se mantienen en campo por varios años, es fundamental realizar una adecuada preparación del terreno, lo que incluye la aplicación de enmiendas tales como compostas, topure y/o arena, así como la correcta formación de las camas de cultivo y el posterior acolchado.
Otro punto importante a tener en cuenta es el tema del riego, pues tanto el exceso como la deficiencia de agua afectan directamente al rendimiento esperado. Ojo, la raíz de la zarzamora es extremadamente resistente, por lo que a veces se suele pensar que no le pasa nada cuando el suelo está encharcado, pero si pasa.
De igual manera la fertilización debe ser adecuada, y aquí depende de cada variedad, pues las empresas conocen los requerimientos nutrimentales de sus nuevas variedades propietarias, por lo que hay que comenzar con dicha recomendación e ir ajustando según lo que se vaya observando.
¿Por qué México tiene tanta relevancia en la producción de zarzamora?
México se ha posicionado como un líder mundial en la producción de zarzamoras debido a varios factores clave.
La ubicación geográfica del país proporciona condiciones ideales para el cultivo de esta fruta. Los estados de Michoacán y Jalisco tienen climas templados, con temperaturas moderadas y un adecuado suministro de agua, esenciales para el crecimiento óptimo de las zarzamoras.
La infraestructura agrícola en México es sólida. Los agricultores cuentan con tecnología avanzada para el riego y control de plagas, lo que permite obtener cosechas de alta calidad. Los sistemas de logística y transporte eficientes también facilitan la exportación de productos frescos a diferentes partes del mundo.
El acceso a mercados internacionales es otro factor importante. México tiene acuerdos comerciales con Estados Unidos y Canadá, como el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), lo que facilita la exportación de productos agrícolas. Esto ha impulsado la producción y el desarrollo de la industria de la zarzamora en el país.
La mano de obra calificada y la experiencia en el cultivo de berries son factores adicionales que explican el éxito de México en este rubro. Los agricultores mexicanos tienen conocimientos especializados en técnicas de producción, lo que se traduce en frutas de alta calidad y en mayores rendimientos.
Finalmente, el enfoque en la sostenibilidad y prácticas agrícolas amigables con el medioambiente ha permitido a México destacarse. El uso responsable de recursos y el compromiso con la calidad y la seguridad alimentaria han aumentado la demanda de zarzamoras mexicanas en mercados globales.