Platiqué con Diego Palacios de Modag, un emprendimiento basado en un cuaderno digital para el campo, a través del cual se busca digitalizar una tarea que tradicionalmente ha sido análoga, como lo es el seguimiento de los ranchos o huertos por parte de los agricultores e ingenieros de campo.
Durante la conversación Diego nos comenta cuál fue la necesidad que motivó el surgimiento de este emprendimiento, así como la evolución que ha tenido a lo largo de los años, por lo que su experiencia resulta bastante interesante para conocer los retos que existen detrás del establecimiento de proyectos digitales para el agro.
¿Qué es un cuaderno digital para el campo y cómo se usa?
Un cuaderno digital para el campo es una herramienta tecnológica diseñada para la gestión integral de explotaciones agrícolas. Reemplaza los tradicionales cuadernos de campo en papel, permitiendo a los agricultores registrar, consultar y analizar la información sobre sus cultivos directamente desde dispositivos móviles o computadoras.
Este cuaderno digital captura datos en tiempo real y los almacena en la nube, ofreciendo acceso inmediato a información crucial como fechas de siembra, tratamientos fitosanitarios, registros de cosecha y datos meteorológicos. La centralización de estos datos facilita su análisis, contribuyendo a la toma de decisiones basada en evidencias.
Los agricultores utilizan estos cuadernos para planificar y monitorizar todas las actividades del campo. A través de interfaces amigables, pueden gestionar las tareas diarias, asignar recursos y verificar el progreso de cada parcela. Además, la capacidad de integrar imágenes satelitales y datos de sensores permite un seguimiento detallado del estado de los cultivos.
La implementación de un cuaderno digital también mejora la trazabilidad y el cumplimiento normativo. Permite generar informes automáticos que respaldan las buenas prácticas agrícolas y facilitan la auditoría de actividades, esencial para cumplir con regulaciones locales e internacionales.
En resumen, los cuadernos digitales son esenciales para la agricultura de precisión, ya que optimizan la gestión de las explotaciones agrícolas mediante la digitalización y análisis de datos, lo que resulta en una mayor eficiencia y productividad.