En este episodio reflexiono sobre qué es aquello que hace que un profesionista agrícola alcance cierto nivel de excelencia, que le permita destacar sobre el promedio, una de las condiciones que yo creo que hay que cumplir para alcanzar el éxito, porque los profesionistas promedio tienen oportunidades promedio.
Alcanzar la excelencia no es sencillo, porque primero necesitamos establecer el punto A, es decir, definir dónde nos encontramos actualmente en las diversas facetas de nuestra vida; luego hay que definir el punto B: dónde queremos estar en cierto tiempo en dichas facetas; seguramente lo que quieres es mejorar.
Una vez establecidos ambos puntos hay que pensar cómo vamos a hacer para pasar del punto A al punto B, qué es justamente donde se desarrolla el proceso que debemos seguir, el cual seguramente requerirá de obtener nuevos conocimientos, desarrollar ciertas habilidades, buscar algunas experiencias específicas, etc.
Porque solo cuando tenemos un proceso establecido podemos avanzar en la búsqueda de la excelencia, porque de lo contrario nos encontraremos siendo impulsados por una toma de decisiones basadas en el sentimiento, que muy seguramente podrían alejarnos de ese objetivo, consciente o inconsciente, que tienes.
¿Qué necesita un profesionista agrícola para ser exitoso?
Para ser exitoso un profesionista agrícola necesita una combinación de conocimientos técnicos, habilidades prácticas y competencias personales.
Debe conocer las técnicas de cultivo, manejo de suelos, control de plagas y enfermedades, así como el diseño, implementación y mantenimiento de sistemas de riego eficientes. Es fundamental tener conocimientos en nutrición de plantas, incluyendo la fertilización y manejo de nutrientes, y estar al tanto de las técnicas de mejora genética y biotecnología para desarrollar variedades más resistentes y productivas.
Además, es importante familiarizarse con el uso de maquinaria agrícola, sensores, drones y software de gestión agrícola. Entre las habilidades prácticas necesarias se incluyen el manejo de maquinaria, la correcta aplicación de técnicas de siembra, cultivo y cosecha, la optimización del uso de recursos como agua y fertilizantes, y la implementación de sistemas de control de calidad en la producción.
En cuanto a las competencias personales, un profesionista agrícola debe ser capaz de liderar equipos, comunicarse eficazmente con empleados, clientes y proveedores, adaptarse a cambios en las condiciones climáticas y del mercado, identificar y resolver problemas de manera rápida y eficiente, y estar abierto a nuevas ideas y tecnologías para mejorar la productividad y sostenibilidad.
También es crucial entender las tendencias del mercado, precios y demandas del consumidor, conocer las leyes y regulaciones locales, nacionales e internacionales que afectan la agricultura, manejar adecuadamente las finanzas, presupuestos y costos operativos, e implementar prácticas sostenibles para proteger el medioambiente y asegurar la viabilidad a largo plazo de la producción agrícola.
Esta combinación de conocimientos y habilidades, junto con una actitud proactiva y una pasión por la agricultura, permitirá enfrentar los desafíos del sector y aprovechar las oportunidades para innovar y mejorar continuamente.