La regulación de los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) en México se basa en la Ley de Bioseguridad de OGM, establecida en 2005, que regula la investigación, liberación, comercialización, importación y exportación de OGM. Esta ley busca proteger la salud humana y el medioambiente.
La Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de OGM (CIBIOGEM) coordina estas actividades, integrando varias secretarías como SADER, SEMARNAT y SS. México es un gran importador de OGM, especialmente maíz y soya, que deben cumplir con estrictas normativas de evaluación y etiquetado.
¿Además de soya y maíz qué otros transgénicos importa México?
En México, además de la soya y el maíz, también se importan otros productos transgénicos que juegan un papel crucial en la agricultura y la alimentación. Estos cultivos han sido modificados genéticamente para mejorar su resistencia a plagas, enfermedades y condiciones climáticas adversas, así como para aumentar su rendimiento y calidad. A continuación, se detallan algunos de los principales transgénicos importados en el país.
Algodón transgénico
El algodón transgénico es uno de los cultivos más importantes en México. Ha sido modificado genéticamente para ser resistente a insectos y tolerante a herbicidas, lo que permite a los agricultores reducir el uso de pesticidas y controlar mejor las malas hierbas. Esto no solo mejora la eficiencia de la producción, sino que también tiene beneficios ambientales al disminuir la cantidad de productos químicos utilizados en los campos.
Canola transgénica
La canola, también conocida como colza, es otro cultivo transgénico que México importa. Esta planta ha sido modificada para ser resistente a ciertos herbicidas, lo que facilita su manejo en el campo y permite una producción más limpia. La canola transgénica se utiliza principalmente para la producción de aceite, que es un componente esencial en la industria alimentaria y en la elaboración de biocombustibles.
Alfalfa transgénica
La alfalfa transgénica es una forrajera clave para la alimentación del ganado en México. Ha sido modificada para ser resistente a herbicidas, permitiendo a los agricultores controlar las malas hierbas de manera más eficiente y producir forraje de alta calidad. Esto es especialmente importante en la industria ganadera, ya que la alfalfa es una fuente crucial de nutrientes para el ganado lechero y de carne.
Papa transgénica
México también importa papas transgénicas, que han sido modificadas para resistir enfermedades comunes que afectan a este cultivo. Estas papas son menos susceptibles a infecciones bacterianas y fúngicas, lo que reduce las pérdidas de cosecha y mejora la seguridad alimentaria. Además, algunas variedades de papas transgénicas han sido desarrolladas para tener una mayor resistencia al daño físico, lo que prolonga su vida útil y reduce el desperdicio.
Remolacha azucarera transgénica
La remolacha azucarera transgénica es otra importación significativa. Este cultivo ha sido modificado para ser resistente a herbicidas, permitiendo un manejo más efectivo y sostenible de las malas hierbas. La remolacha azucarera es fundamental para la producción de azúcar, y las variedades transgénicas ayudan a asegurar un suministro estable y eficiente de este producto esencial.
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